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Rico$

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Ciro Bianchi Ross

En estos días, mientras releía ese libro extraordinario que es La alta burguesía cubana; 1920-1958 (Editorial de Ciencias Sociales, 2003) del fallecido historiador Carlos del Toro, me dio por precisar quién era el hombre más rico de Cuba en 1959. No llegué, me anticipo a decirlo, a conclusión alguna, pero sí acopié los nombres de algunos que estuvieron entre los más ricos o pasaron por tales. Figuras que en el campo de la economía descollaron en la Cuba de entonces y que, a no dudarlo, fueron punteras en los giros en los que operaban. Para caracterizarlas, y lo digo antes de que un lector avisado lo advierta, reproduzco la información que en cada caso ofrece Del Toro. Veamos.

HACENDADOS

Julio Lobo Olavarría (1889-1983) sobresale entre los hacendados. En 1959 era el mayor propietario de centrales azucareros (12) y el mayor productor de azúcar (3 941 814 sacos de 325 libras). Era también el mayor colono, pero para evadir impuestos traspasó sus colonias cañeras a sus hijas Leonor y  María Luisa y a su cuñado Mario Montoro Saladrigas, que aportaba él solo 56 305 367 arrobas de caña.

            En 1946, en el censo de productores de azúcar, Lobo aparecía con ocho centrales y ocupaba el lugar número nueve en el índice de producción total. En 1953 se le consignaba con nueve centrales y el cuarto lugar, en tanto que la familia Rionda (seis centrales) ocupaba, al igual que en 1946, la segunda posición en producción y pasaría a la cuarta en 1959, mientras que los sucesores de Laureano Falla Gutiérrez  (siete centrales) suben del lugar seis en 1946 al tres en 1953, sitial que mantenían en 1959. La familia Gómez Mena (cuatro centrales) ocupaba la décima posición en cuanto a los productores en 1926-28 y la mantenía en 1959. También en esa fecha figuraban entre los 20 grandes productores cubanos de azúcar las familias Aspuru y Azqueta, con tres centrales cada una,  Tarafa, con dos, y Mamerto Luzárraga pasa del lugar l7, en 1946, al 2l.

            Hasta 1925 no se produjo aquí azúcar refinado para la exportación. A partir de esa fecha comienza a producirse en el central Hershey, de Santa Cruz del Norte, propiedad de Milton Hershey, el magnate de los chocolates norteamericanos. En 1956, sus sucesores, con 22 700 quintales diarios, ocupaban el primer lugar en la producción y Julio Lobo (150 000 quintales) el tercero. En 1959 Lobo adquirió los centrales de la Hershey Corporation y controló el mayor volumen del refinado del azúcar cubana

En cuanto a las destilerías, los mayores productores de alcohol en 1956 eran los herederos del industrial cubano-español José Arechabala. En esa fecha sus empresas producían más de 50 millones de litros, cifra a la que se añadían otros siete millones de litros de alcohol de 95 grados y aguardientes. En ese año la firma Bacardí, que se impuso en el mercado internacional, produjo algo más de tres millones de litros.

TRUST DEL DOLOR

En cuanto a los ganaderos, los mayores propietarios al triunfo de la Revolución eran la familia Infante (30 000 cabezas de ganado) Remigio Fernández (20 000) Bernardo Sánchez Adán (l4 000) y la familia Rionda (12 000). De los 20 grandes ganaderos registrados entonces, nueve se concentraban en la antigua provincia de Oriente (90 000 cabezas)  cinco en Camagüey (50 000) cuatro en Pinar del Río (l4 000) y uno en Isla de Pinos (5 000). El único gran propietario de Las Villas (4 000 cabezas) era José Eleuterio Pedraza, un oscuro sargento del Ejército que saltó a los primeros planos de la actualidad tras el golpe de Estado del 4 de septiembre de 1933. Estos datos, aclara Del Toro,  hay que tomarlos con reserva pues los aportaron los mismos propietarios ya exiliados en EE UU.

            Ernesto Sarrá, Teodoro Johnson y Francisco y Francisco Taquechel eran las cabezas de la industria farmacéutica. En 1929 hicieron ventas por diez millones de pesos. En 1938 un informe revelaba que el poder de esos propietarios llegaba a tal extremo que obligaban a los laboratorios extranjeros a negociar solo con ellos y eran capaces de arruinar a cualquier farmacéutico cubano que quisiera convertirse en importador.

26 LITROS DE CERVEZA PER CAPITA

En cuanto al tabaco, las marcas de mayor producción en 1958 fueron H. Upmann, de Méndez, García y Cía; Partagás, de Cifuentes;  La Corona, de Tabacalera Cubana; Gener, de Palicio y Romeo y Julieta, de Argüelles. Totalizaron 68 millones de unidades. En cuanto a los cigarrillos,  los hijos de Domingo Méndez (Regalías El Cuño) eran los más poderosos seguidos por los hermanos Trinidad (Trinidad) y Ramón Rodríguez (Partagás). Continuaban en orden descendente Tabacalera Cubana (La Corona) Martín Dosal (Competidora Gaditana) Méndez, García y Cía (H. Upmann) Calixto López (Edén) y Villamil y Santalla (Royal).

            Al igual que el tabaco y los cigarrillos, las cervezas cubanas alcanzaron una posición favorable en el mercado interno y se exportaron desde 1927. En la década de los 50 producían cervezas y maltas la Nueva Fábrica de Hielo S. A. (La Tropical) fundada en 1888 y bajo el control de la familia Blanco Herrera, la Compañía Cervecera Internacional (Polar) establecida en 1911 con capital cubano-español, y la Compañía Ron Bacardí S. A. (Hatuey). El récord de consumo de cerveza en la Isla se registró en 1952 con 25,6 litros per cápita.

            En la radiodifusión,  Goar Mestre no tenía competidores. En 1959 controlaba CMQ Radio, CMCB Radio Reloj, CMBF Onda Musical, CMQ-TV, CMBF-Canal 4 y el Canal 7, que trasmitía películas. Existía además el Cana 2-Tele-Mundo, propiedad de Amadeo Barletta, dueño además del periódico El Mundo y vinculado a la mafia norteamericana. Goar y sus hermanos Luis Augusto y Abel eran propietarios además de unas 26 empresas en giros tan disímiles como la publicidad, los alimentos, la construcción y la venta de automóviles, entre otros, negocios familiares que comenzaron en su natal Santiago de Cuba con la droguería Mestre y Espinosa, propiedad de sus padres.

COMERCIANTES Y BANQUEROS

Entre los grandes comerciantes importadores y exportadores emerge asimismo Julio Lobo. Se destacan además en esta línea el clan de los Falla Gutiérrez, Aspuru, los herederos de Nicolás Castaño, la familia Tarafa y la acaudalada familia Rionda, que en el siglo XIX se vinculó a la poderosa firma de corredores de azúcar londinense Czarnikow Ltd., y más acá, gracias a matrimonios sucesivos, creó nexos con los Fanjul, los Azqueta y los Gómez Mena.

            El banco cubano que operaba el mayor capital en 1958 era The Trust Company of Cuba; 234 millones de pesos, Le seguían el Banco Núñez (100) el Continental Cubano (88) el Agrícola Industrial (48) y el Gelats (45). El Banco Financiero, de Julio Lobo, operaba en esa fecha con 13 millones. The Trust Company estaba controlado por los herederos de Falla Gutiérrez.

            En esta relación que compilé, repito, gracias al libro de Carlos del Toro, no son todos los que están ni están todos los que son. Es solo un botón de muestra.  Gente que, dijo el economista Oscar Pino Santos,  no aparecen en una historia  convencional de Cuba  y que sin embargo tuvieron, como en el caso de Rionda, cicerone  de los intereses norteamericanos, más poder que muchos políticos, incluidos los mandatarios. El nombre de Julio Lobo se repite una y otra vez. ¿Fue acaso el más rico?  Parece que no si nos atenemos al juicio del investigador Guillermo Jiménez. Un inventario de los activos de Lobo y  de  los sucesores de Falla Gutiérrez, dice, arrojaría que aunque Lobo era puntero en el sector del azúcar, era superado por los Falla en la importancia y eficiencia de sus centrales, en la magnitud de los capitales invertidos en los consorcios azucareros norteamericanos y en la fortaleza de su banco.

            Precisa Jiménez: “Tres de los centrales de los  Falla estaban considerados entre los 20 mayores, y solo uno de los de Lobo, el Hershey, estaba dentro de ese grupo. Algo similar ocurría con el rendimiento industrial, pues los Falla tenían dos entre los 2l más altos, mientras que los de Lobo en general no pasaban de los considerados medianos, salvo un solo caso”.      

           

                    

1 comentario

arturo blet -

quisiera saber de un articulo q lei hace unos años de ciro en juventud rebelde sobre el constructor del actual teatro karl marx y el edificio sierra maestra en la habana creo era de apellido hornedo casado ocn una rica habanera